Si deseas abrir una empresa en los Estados Unidos, la primera pregunta que debes hacerte es qué modelo de negocio lanzar. En Estados Unidos es posible abrir empresas individuales o diferentes tipos de asociaciones; esta elección es muy importante porque establece el régimen fiscal al que estará sujeto. Además, el modelo comercial determina si serás personalmente responsable de los cargos adeudados por tu empresa.
Los siguientes tipos de negocios se pueden abrir en los Estados Unidos.
1. Empresas unipersonales
En este caso, serás el único propietario y administrador de tu negocio. En cierto sentido, tu persona y tu empresa se corresponden desde un punto de vista fiscal: no habrá división entre tus impuestos (personales) y los adeudados por tu negocio. Además, y lo más importante, serás personalmente responsable de las cargas que pueda enfrentar tu empresa. Esto significa que si, en el desafortunado caso de que tu empresa se endeude, tendrás que pagar personalmente que esas deudas (con tu cuenta personal).
Este tipo de modelo de negocio es adecuado para autónomos y proveedores de servicios similares que tienen pocos gastos y, por lo tanto, poco riesgo de pedir prestado.
2. Corporaciones
Las corporaciones constan de dos o más personas. Algunas subcategorías pertenecen a esta categoría, entre las cuales las más comunes son:
- Corporaciones de tipo S: con esta opción, los accionistas de la empresa son parcialmente responsables de los gastos de la empresa;
- Corporaciones de tipo C: en este caso, la empresa es una entidad jurídica completamente separada de la persona física; por tanto, los accionistas no son personalmente responsables de la empresa. Esta opción también es muy flexible y es una de las favoritas de aquellos que buscan expandir su negocio con el tiempo. Cada accionista, de hecho, posee algunas acciones de la empresa y la corporación C prevé la posibilidad de vender acciones a otros accionistas en el futuro.
3. LLC
El modelo de negocio de la Sociedad de Responsabilidad Limitada es uno de los más populares en los Estados Unidos. Con esta opción hablamos de responsabilidad limitada: podemos definirla como una fórmula híbrida. Por un lado tenemos una empresa en la que participan dos o más personas (socios), pero no se considera una entidad jurídica separada, distinta de las personas que la integran. Desde el punto de vista fiscal, esto significa que, con la LLC, los impuestos se cargan a los accionistas que forman parte de la empresa.
La gestión de la LLC, por lo tanto, es más simple desde el punto de vista contable, incluso si, en comparación con la corporación tipo C, tiene la desventaja de responsabilizar parcialmente a los accionistas de las cargas fiscales de la empresa.
Modelos de negocio en Estados Unidos: ¿cuál elegir?
Ahora que sabes qué modelos de negocio están disponibles, ¿cómo puedes elegir?
Tu elección debe basarse en primer lugar en tus necesidades: ¿serás el único propietario o tendrás socios?
La segunda evaluación que debe realizar es sobre el componente de riesgo: si el riesgo de sufrir pérdidas significativas es bajo (generalmente para las pequeñas o medianas empresas, el riesgo es mínimo), la opción más popular es la LLC.
Aquellos que sueñan en grande y con expandirse dramáticamente, por otro lado, pueden comenzar inmediatamente con una Corporación C, incluso si desde un punto de vista contable estas empresas son las más complicadas de administrar.
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